Puede una persona contagiada o no por COVID-19 ser tratada como menos humano por pertenecer a un territorio o Etnia con Alta incidencia? Veamos los casos de ciertos departamentos en Honduras, tales como Cortes, Colon y Fco. Morazan; agregado a esto la participación de las Etnias Lencas, Miskitas y Garifunas.
”La estigmatización puede socavar la cohesión social y provocar el aislamiento social de grupos de población, lo que podría contribuir a que las probabilidades de propagación del virus sean mayores, no menores. Esto puede dar lugar a problemas de salud más graves y a dificultades para controlar un brote de la enfermedad”.
La estigmatización puede:
• Llevar a las personas a ocultar la enfermedad para evitar la discriminación
• Disuadirlas de buscar atención médica inmediatamente.
• Disuadirlas de adoptar comportamientos saludables.
Fuente UNICEF, OMS y contribución de PLANAPONH
Resuena en mi mente una sola palabra al iniciar con ésta opinión, muy adecuada por cierto; pues recalca y fortalece el discurso, que es desde los entes gobernantes de Honduras en primera instancia, donde descansa el DERECHO de los individuos que habitamos esta nación, partiendo de esto puedo decir que nadie es inferior ni superior, todos tenemos o deberíamos tener las mismas posibilidades en un país donde existe democracia y el valor que posee uno me beneficia, de la misma forma otro se ve retribuido.
Vivimos un tiempo crítico para el cual deberíamos estar preparados; me refiero al trabajo continuo y sostenido que deben tener los diferentes sectores, por mencionar algunos señalo; educación, salud, económico financiero y cultural, los cuales me parecen relevantes sin socavar la importancia de otros; ¿por qué?, ellos son un reflejo del cómo la población acata las órdenes para su bien y seguridad, la paz que produce estar monetariamente preparados como país para afrontar un infortunio de tal magnitud llamado pandemia por el COVID-19 y el modo cómo sus habitantes reaccionan con sus prójimos, desde una cultura que se basa en el bien colectivo, respeto a los ancianos, personas de tercera edad y la fuerza que se irradia desde la identidad nacional para salir avante del caos mundial.
Como ciudadanos y habitantes responsables de este país, debemos hablar y no callar nuestra realidad y condición sanitaria echando a un lado el estigma y fortaleciendo desde el interior la lucha por los derechos a los cuales todos y todas somos merecedores; porque la estigmatización no deja elementos positivos, sólo atrae el miedo y éste consigo una precaria situación, que si no se aborda desde los primeros síntomas puede ser mortal.
Alentemos el pensamiento de integración ética, en nuestra comunidad, desde la familia y el gobierno, la iglesia, los medios de comunicación; que en cada municipio, aldea, caserío, barrio y colonia seamos uno, que el estigma y el desconocimiento no se alíen con nuestro cerebro y mucho menos con los entes de salud en ninguna región del territorio hondureño, para despreciar o restarle importancia a los ciudadanos. Todos somos y pertenecemos a Honduras, juntos construimos patria.
No más miedos y prejuicios usted y yo tenemos derecho a @salud, @atencióndigna, @honra, @valor
Fuentes
https://www.fadesaludmental.es/el-estigma/que-es-el-estigma.html
http://www.comie.org.mx/congreso/memoriaelectronica/v11/docs/area_06/0305.pdf