Licenciado Olban Valladores
Asegura el analista político de Hn.
Olban Valladares:
Corruptos perdieron el miedo a entes contralores del Estado
Lnes 20 de abril de 202
Urge hacer una revisión completa del sistema de lucha contra la corrupción en el país, de lo contrario, jamás éste será un tema que va a tener tranquilo al pueblo hondureño.
El analista político, Olban Valladares, urgió hoy una revisión completa del sistema de lucha contra la corrupción, en Honduras, ya que las auditorías a posteriori no funcionan y, lo más preocupante, es que los corruptos les perdieron el miedo a los entes contralores del Estado.
Tanto al Tribunal Superior de Cuentas como a la Fiscalía Especial de Combate a la Corrupción, los corruptos ya les perdieron el miedo, ya que ambas instituciones padecen los mismos males que van desde la falta de recursos hasta la falta de personal.
Usted va a los archivos del Tribunal Superior de Cuentas y se encuentra con miles de expedientes, que están allí, porque no hubo recursos para poderlos proseguir y eso, obviamente, a quien favorece es al corrupto.
A lo anterior se suma el reducido número de fiscales y eso hace que, a cada fiscal le asignen una cantidad monstruosa de expedientes que, aunque tenga buena voluntad no tendrá la capacidad física para atender tantos y tantos casos que les ponen en frente.
Por consiguiente, es urgente hacer una revisión completa del sistema de lo contrario jamás la corrupción, en el país, será un tema que va a tener tranquilo al pueblo hondureño, reiteró.
Valladares recordó que, en un inicio, se propusieron las auditorias apriory y que las auditorías acompañarán el procedimiento de órdenes de compra, de licitaciones, cotizaciones y todo lo que dicta la ley, para que una vez que el auditor estampaba su firma en el expediente, tendría todos los visos de ser correcto.
Lamentablemente, por la falta de recursos, se cayó en otro pecado y es que los auditores no eran pagados por el ente contralor, sino que por las instituciones que estaban auditando.
Obviamente, después de un periodo más o menos prolongado había una familiarización entre los auditados y el auditor que llego un momento en que, en algunos casos, se hicieron cómplices de actos irregulares.
Entonces se volvió al método de hacer auditorías a posteriori, pero eso ya no funciona en el país porque el problema es que las instituciones están tan escasas de recursos y de personal calificado.
Cuando vienen a querer intervenir ya pasaron cinco o seis años y muchas de esas causas expiraron, ya no pueden encontrar a los responsables o los responsables ya no tienen los recursos para resarcir los daños y todo queda como que si no hubiera pasado nada.